Informe mensual de la dinámica productiva, diciembre 2001.

La nueva temporada de exportación de frutas frescas ha comenzado con normalidad para los frutales primores como cerezas y damascos. Las cerezas fueron afectadas por algunas precipitaciones en el mes de noviembre en la zona productora, las que habrían provocado partiduras en los frutos. Sin embargo, esto no ha afectado las exportaciones, las que se han desarrollado con normalidad e incluso ya se han enviado cerezas a Japón, mercado altamente exigente en términos de calidad y recientemente abierto para este producto. En el caso de la uva de mesa proveniente del norte, se ha exportado una menor cantidad que en esta misma época del año pasado, por la normalidad en el período de madurez de la fruta, la que en el período anterior se adelantó producto de las condiciones climáticas. También se ha iniciado sin retrasos la cosecha de trigo en el país y se estima que en la VI Región ya se ha trillado un 50% del grano, y se está cosechando en los secanos de la VII Región. Todavía no es posible tener una visión clara acerca de los rendimientos y la calidad del cereal. Los precios ofrecidos se han situado en los niveles estimados por Odepa con anterioridad y son de: $10.500/qq para el trigo fuerte; $10.000/qq para el intermedio y $9.500/qq para el suave, todos base Santiago. El maíz se encuentra en pleno desarrollo y se observa, en general, un buen estado de los cultivos. El precio internacional continúa firme, con niveles un 8% superiores a los del año pasado para la Argentina y los Estados Unidos, quienes son nuestros mercados relevantes. Los mercados de futuros del cereal mantienen la misma tendencia. Con estos antecedentes se continúa estimando que la cosecha interna debería comenzar con niveles superiores a los $75/kg, en comparación a los $62/kg con que comenzó la temporada pasada. Dentro de los cereales, es necesario señalar que la avena ha presentado un aumento interesante en sus exportaciones al mercado latinoamericano, el que se vislumbra como un comprador sólido y susceptible de ser ampliado. La avena nacional es reconocida por su buena calidad, por lo que compite en buena forma con la proveniente de Canadá y Australia. Esta situación resulta aún más interesante si se tiene en cuenta que la avena es una de las pocas alternativas de rotación para el cultivo del trigo, tras la drástica disminución de la siembra de raps y la reducción del cultivo de lupino. En viñas, a pesar de que el manejo productivo ha estado orientado especialmente a mejorar la calidad, evitando los grandes rendimientos, se estima un nuevo año con aumento de producción, como consecuencia de las nuevas plantaciones que se han efectuado. No obstante, se prevé que la comercialización de este año, que comenzará a mediados de febrero, no será tan traumática como la del año anterior, debido a que las bodegas no se encuentran saturadas, como ocurrió durante la cosecha pasada. Adicionalmente, se espera que ésta sea una temporada con una producción de buena calidad, por la primavera suave que se ha presentado, con buen grado alcohólico y buen aroma, sabor y color. Los porotos para consumo interno continúan con sobrestock en el mercado, por lo que se estima que los precios continuarán en un nivel deprimido de $100 a 150 por kilo. Un panorama distinto se observa para los porotos negros, cuyo destino mayoritario es la exportación, ya que la Argentina, gran exportadora, disminuyó sus siembras y Brasil, productor e importador, redujo su producción. De este modo, se espera que la cosecha enfrente un nivel de precios del orden de $250 a 350/kg, en comparación con los $100-150/kg obtenidos en la temporada pasada. En el sector pecuario, la producción de carne en vara hasta el mes de octubre ha mantenido la tendencia observada con anterioridad. Esto es: un fuerte incremento de la producción de carne de ave, un 15,8% superior a la del mismo período anterior; un similar incremento en la producción de carne de cerdo, con un 15,2% más, y una disminución de 4,7% en la producción de carne en vara de bovinos. La disminución de la producción de carne bovina se ha debido, como ya ha sido comentado con anterioridad, a la retención de hembras efectuada para destinarlas a la producción de leche, lo que derivó en un menor beneficio. En todo caso, la proyección para 2002 es un aumento en la producción, ya que la retención de vientres del año anterior se traduce también en un mayor número de partos, lo que implicará una mayor oferta de ganado. En el gran crecimiento registrado para la carne de aves destaca la carne de pavo, que ha incrementado su producción hasta el mes de octubre en un 35,5%. El crecimiento presentado por las carnes de aves y de cerdos está asociada con el aumento en la exportación de estos productos, donde México aparece como un destino importante, especialmente para cerdos, cuyo mercado fue abierto sólo a partir de este año 2001, aunque Japón continúa siendo el principal destino para la carne de cerdos. En cuanto a precios de bovinos, el precio promedio del novillo en pie hasta noviembre ha sido un 2,2% superior al acumulado hasta el mismo mes del año pasado y la curva de precios ha presentado una evolución normal con un peak de $612/kg en el mes de agosto. Finalmente, la recepción de leche en plantas acumula hasta octubre 1.285 millones de litros, un 14% más que lo recepcionado en el mismo lapso del año anterior. Al mismo tiempo, el precio promedio ponderado a productor a nivel nacional acumula una variación positiva de 11,3%. No obstante, se observa que en el mes de octubre se produce una disminución en el precio pagado a productor, de un 2,1% en relación al mismo mes del año anterior, con una baja de $114,2/litro a $111,8/litro. Esta disminución del valor pagado por litro tiene varias causas, económicas y físicas. Entre las primeras se encuentra la tradicional baja de precios en la primavera, que se observó en este año en casi todas las empresas no afectadas por la precautoria de la Comisión Resolutiva. Incluso entre las empresas que quedaron obligadas hasta el 15 de noviembre a mantener la pauta de pago vigente en julio, hay dos que rebajaron el bono de invierno, lo que ha motivado un nuevo reclamo de los productores. A lo anterior se agrega una variable física, que es la diferente composición de la leche primaveral, causada por los cambios en la alimentación y la mayor proporción de uso de praderas.