Coyuntura macrosectorial, septiembre 2003.

El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, afirmó que la institución requiere de una reforma radical, especialmente del Consejo de Seguridad, que debe ser ampliado y democratizado para que recobre la confianza de los Estados y de la opinión pública mundial. Luego de referirse a las "amenazas duras" del terrorismo y las armas de destrucción masiva y a las "amenazas blandas" de la pobreza, el hambre y las epidemias, el funcionario internacional subrayó que acontecimientos como los del 11 de Septiembre y la invasión a Irak sin autorización del Consejo de Seguridad han desestabilizado el sistema internacional y dividido a los Estados miembros. "La gran virtud de las Naciones Unidas sigue siendo su legitimidad, basada en los principios fundacionales del derecho internacional aceptados por todos los Estados", declaró Annan, a la vez que propuso una reforma de algunos de los órganos que conforman la ONU, como una forma de que sus decisiones recuperen legitimidad a los ojos del mundo en desarrollo. En otro contexto, el de la apertura de la V Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Cancún, la autoridad internacional pidió a los países ricos suprimir lo antes posible sus barreras y subvenciones por el bien de la humanidad. Cerca de Cancún, en Estados Unidos, culminó el proceso de aprobación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Chile, mediante la firma, por parte del Presidente de ese país, del texto del acuerdo comercial. En Chile el TLC está siendo sometido a la consideración del Congreso Nacional, institución donde se debate si corresponde entregar compensaciones a la agricultura o si más bien lo que corresponde es una revisión global de los criterios utilizados por el Ministerio de Agricultura para focalizar sus instrumentos. Para tal efecto, el Ejecutivo decidió constituir un Grupo de Trabajo Interministerial, con la participación de los Ministerios de Relaciones Exteriores, Hacienda, Economía y Secretaría General de la Presidencia, y bajo la coordinación del Ministerio de Agricultura, a través del Director de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA), Carlos Furche. La misión de los convocados a esta nueva instancia será realizar una revisión del marco normativo, de los instrumentos y políticas de fomento productivo, así como de la institucionalidad pública vinculada al desarrollo agrícola, en particular, el de la pequeña agricultura. Septiembre es un mes de discusión parlamentaria del Presupuesto de la Nación. En este marco se generan debates laterales en torno a las proyecciones económicas. Un punto en el que las posiciones son coincidentes es en el crecimiento esperado en el PIB durante el presente año, que se estima cercano al 3,5%. El Producto Interno Bruto (PIB) registró, en el primer semestre de 2003, un crecimiento de 3,2 % con respecto a idéntico período del año anterior. El comportamiento de la demanda interna sorprendió positivamente a los analistas, al anotar un incremento de 3,4% con una evolución favorable del componente inversión. La formación bruta de capital fijo varió 1,4% en el primer trimestre y 4,3% el segundo. Considerando la dinámica de las diferentes actividades económicas, se aprecia que el sector silvoagropecuario primario mantuvo un ritmo de expansión del producto superior al del PIB nacional. En efecto, la agricultura creció 4,7% en los primeros seis meses de 2003. Dicha alza se compone de variaciones de 6,1% y 3,3% para el primer y el segundo trimestre, respectivamente. El subsector frutícola es uno de los principales responsables de este resultado. La industria manufacturera experimentó un incremento de 3,3% durante el semestre concluido en junio de 2003, impulsada por la producción exportable. Particular dinamismo manifestaron las ramas de Elaboración de Conservas, Producción de Madera y sus Productos y Fabricación de Papel. La caída en la Producción de Azúcar explica el retroceso que mostró la producción industrial de bienes de consumo, el que se vio morigerado por alzas importantes en la Producción de Carnes y la Fabricación de Muebles. Durante la primera mitad de 2003 las exportaciones de productos silvoagropecuarios superaron en 3,7% al monto alcanzado entre enero y junio del año precedente. En el primer semestre la balanza comercial del sector agropecuario silvícola obtuvo un saldo positivo de 2.656 millones de dólares, con exportaciones por US $3.291 millones e importaciones por US $635 millones.