Sección Análisis Macrosectorial DESARROLLO AGR ÍCOLA EN TERRITORIOS DE DIFERENTE POTENCIAL ECON ÓMICO: UNA PROPUESTA DE ANÁLISIS ESPACIAL DEL VI CENSO NACIONAL AGROPECUARIO Alfredo Apey Guzmán Artículo publicado en Temporada Agrícola N° 12, ODEPA Segundo semestre de 1998 1 1. Introducción La amplia variedad de paisajes socioproductivos presentes en el mosaico geográfico de Chile es un fuerte escollo para la generación y el análisis de información estadística, que de cuenta efectiva de los procesos de transformación agraria en curso. Ello obedece a que la información disponible normalmente se ordena en función de la jerarquía administrativa vigente. De este modo, la escala de desagregación de la información va desde el nivel nacional al comunal, pasando por los niveles regionales y provinciales. Sin embargo, como no necesariamente existe una correspondencia funcional entre niveles de agregación geográficos sustentados sobre la base de límites administrativos, con zonificaciones territoriales delimitadas bajo criterios de homogeneidad agroecológica, se hace imposible la elaboración de diagnósticos detallados que sirvan para el diseño de políticas sectoriales focalizadas en lo social y en lo espacial. Consecuentemente, resulta altamente favorable que la información recogida en el VI Censo Nacional Agropecuario se encuentre agregada a partir de niveles subcomunales -en este caso en distritos censales- lo cual permite interpretar y reconstituir la información sectorial con otra perspectiva y con mayor detalle. Considerando estos elementos, la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA) se encuentra desarrollando una línea de trabajo tendiente a reinterpretar la información del VI Censo Agropecuario, teniendo como referencia formas alternativas de agrupación territorial a las entregadas por la división administrativa del país. 2. Objetivos y metodología Este artículo corresponde a un intento preliminar deif icalacsión, agrupación y análisis de la información disponible en el último Censo, según las Areas Ambientales Homogéneas preestablecidas por el Instituto Nacional de Estadística1s (INE) . El objetivo central de este trabajo es contrastar la hipótesis que presupone diferencias significativas en los estándares asociados a la actividad agrícola, en la medida en que se vincula el desarrollo de este sector con las zonas agroclimáticas predominantes en el país. Conceptualmente, es esperable encontrar contrastes estadísticos de mayor significancia al comparar la situación agraria promedio de las Areas Homogéneas entre sí, que entre la de dos o más regiones administrativas. En este último caso, los datos sintetizan la realidad promedio de la región, impidiendo relevar sus particularidades locales. Sobre la base de estas Areas Homogéneas, el INE ha categorizado a todos los distritos censales de acuerdo a la zona agroecológica en que se localizan. Esto ha resultado en un set de 16 Areas Homogéneas que cubre la totalidad de la superficie agrícola nacional. 1 Existen diversos estudios análogos realizados por autores que han buscado zonificar nuestra situación agrícola del país. Entre otros destacan los estudios de zonificacióna rdeoasli zpor profesionales de CIREN, CORFO, INIA, AGRARIA y de las Universidades dei leC hy Austral. 2 Como esto implica que las 329.705 explotaciones agrícolas encuestadas en el Censo se encuentran clasificadas según el Área Homogénea a la que pertenecen, ha sido factible agrupar y comparar las diversas variables recogidas en cada encuesta, según dicho criterio de diferenciación espacial (Cuadro(1 N). Sin embargo, cabe señalar que la información del VI Censo Agropecuario clasifica a las explotaciones en cinco categorías: a) agropecuarias con tierra; b) agropecuarias sin actividad; c) agropecuarias sin tierra; d) forestales, y e) parques nacionales, reservas y áreas protegidas. Las cifras publicadas por el INE, tanto en sus textos impresos como en el CD-Rom, considera sólo la información recogida bajo los primeros tres criterios señalados (a, b y c). En consecuencia, aun cuando los totales regionales y nacionales de las variables entregadas en este texto varían levemente de las ya publicadas –dado que en este trabajo se ha considerado el universo censal total- las tendencias identificadas no acusan diferencias 2de fondo . La premisa de base que sustenta este análisis, es que cada Area Homogénea conlleva una cierta combinación de elementos tales como suelos, clima y localización, lo que origina, en mayor o menor medida, dinámicas y resultados económicos diferenciales, dadas las particularidades que en cada una de ellas adquieres ealr rodllo de las actividades silvoagropecuarias. Estos resultados económicos se acumulan año a año y se transforman, a su vez, en factores desencadenantes de otros procesos complementarios de diferenciación (estándares socioeconómicos, inversiones en infraestructura, migraciones, entre otros). Estas dinámicas han dado origen a significativas desigualdades regionales que son fundamentales de considerar en el diseño de las políticas de desarrollo sectorial. En virtud de lo anterior, resulta factible aventurar una clasificación esquemática de las 16 Areas Homogéenas del INE utilizadas en este estudio, de acuerdo a las siguientes categorías productivas, que sintetizan las posibilidades de desarrollo agrícola de cada territorio, en el corto y en el mediano plazo: 3 Areas de alto potencial: Riego, Valle secano, Urbano. 3 Areas de mediano potencial:e cSano interior, Costa, Influencia lacustre, Precordillera, Ñadis. 3 Areas de bajo potencial: Altiplano, Coironal, Cordillerae,s Dértico, Lluvioso- bosque, Transandino-estepario, Transición. Un aspecto relevante a consignar es que las Areas Homogéneas presentan ciertos grados de diversidad interna que han sido ignorados para efectos de simplificación, lo que implica un margen de generalización que puede llegar a ser significativo. En otros términos, Areas Homogéneas que, a modo de ejemplo, han sido clasificadas como de riego, contienen en su interior sectores de secano o partes ubicadas en la pilrlercao.r dEste es por tanto un límite del enfoque metodológico de este estudio, lo que obliga a interpretar la información con cautela, más allá de su utilidad para identificar tendencias generales. 2 Para mayores antecedentes remitirse a Farías, C. Especialización Productiva de la AgriculturRae: vUisniaó n de las Cifras del VI Censo Nacional Agropecuario, publicado en esta misma edición. 3 En lo que respecta a las variables recogidas por el Censo, en esta ocasión se ha trabajado con cierto detalle la distribución espacial de las explotaciones agrícolas, la superficie de trigo blanco, la existencia de cabezas de ganado y el empleo agrícola. La información se presenta clasificada según Areas Homoegaésn, tanto a nivel nacional como regional, sin hacer referencia a estratos por tamaño, tarea que se espera realizar con posterioridad. A modo de ejemplo, en la Figura 1 es posible visualizar la cobertura tanto de los distritos censales como de las Areas Homogéneas en la Región del Maule. En ella destacan claramente en forma longitudinal las Areas Costa, Secano interior, Riego, Precordillera y Cordillera. Finalmente, es necesario destacar quee esle pnrte artículo no busca profundizar en el análisis de la información entregada, sino sólo sugerir un enfoque metodológico que se estima de utilidad para suministrar una información básica sectorial más analítica y detallada. Figura N( 1 Séptima Región del Maule: Distritos Censales y Areas Homogéneas Costa Riego Secano interior Precodillera Urbano Cordillera Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. 4 3. Resultados 3.1 Explotaciones agrícolas Una de las incógnitas iniciales por dilucidar a través de este estudio dice relación con la distribución de las explotaciones por Area Homogénea, así como con la asociación cuantitativa existente entre los conceptos de explotación agrícola (base de la recopilación de la información), y el de unidad predial (extensión de terreno identificado con un número de rol entregado por el Servicio de Impuestos Internos). Debido a que una explotación puede estar constituida por varios predios, o inclusive puede no vincularse a estas unidad3es , resultó de interés desagregar dicha variable en las cinco categorías presentadas en el Cuadro( 1N. Cuadro N(1 Explotaciones Agrícolas: distribución por Area Homogénea y número de predios Area Homogénea Sin Un Dos Tres Cuatro Cinco o más Total predios predio predios predios predios predios general Altiplano 306 371 155 55 20 34 941 Coironal 4 491 182 36 33 43 789 Cordillera 132 4.769 1.353 418 158 163 6.993 Costa 565 33.848 9.016 3.456 1.592 2.354 50.831 Desértico 181 736 214 105 51 102 1.389 Influencia lacustre 110 21 2 3 5 141 Lluvioso-bosque 12 1.302 248 74 29 41 1.706 Ñadis 1 7.288 1.418 373 139 166 9.385 Precordillera 261 15.873 4.247 1.520 686 952 23.539 Riego 2.058 97.199 19.917 7.044 3.122 4.365 133.705 Secano interior 335 24.961 6.509 2.635 1.222 1.713 37.375 Transandino-estepario 7 363 97 31 8 17 523 Transición 13 939 232 67 35 40 1.326 Urbano 109 1.161 176 54 21 36 1.557 Valle secano 60 39.967 11.101 4.304 1.887 2.186 59.505 Total general 4.044 229.378 54.886 20.174 9.006 12.217 329.705 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. Un aspecto destacable de la información presentada es la alta concentración (59%) de predios y explotaciones en el riego y en el valle secano, que son justamente Areas Homogéneas de alto potencial; más allá dees cla la de producción, ello sugiere que una fracción importante de las explotaciones agrícolas del país tiene ventajas comparativas que le permitirán permanecer en el negocio agrícola. Del mismo modo, 13.667 explotaciones (4,2%) están ubicadas en Areas Homogéneas definidas como de bajo potencial relativo, aun cuando son zonas que presentan ventajas en otros aspectos, tales como el desarrollo del agroturismo o el forestal. Sin embargo, esto no implica una aproximación determinista, pues amplios sectores del secano costero e interior pueden ser habilitados para riego, así como los Ñadis también pueden ser mejorados a través de obras de drenaje. Ambos casos podrían dar origen a sectores de alto potencial productivo. 3 Una explotación sin predio es, fundamentalmente, aquel establecimiento qupeo noe dies suelos agrícolas para la producción, pero que se dedica a la producción de animales o productos pecuarios, independientemente que se encuentre en zonas rurales o urbanas, tales como planteles o criaderos de animales, colmenares, entre otros. 5 Por otra parte, es interesante constatar que el 69% de las explotaciones registradas en el universo censal son uniprediales. Aunque por una parte esto implica que un alto porcentaje de las explotaciones se encuentran indivisas, no es menos cierto que el 30% de ellas se encuentran fragmentadas en dos o más predios. De alguna manera, esta información nos aleja de la concepción tradicional en la que una explotación suele a asociarse a un predio. Los antecedentes contenidos en la Cu(a d2r op eNrmiten profundizar este análisis, siendo posible determinar la zloaccaiólin de las unidades productivas en las Areas Homogéneas presentes en cada unidad regional. Cuadro 2 Número de explotaciones agrícolas: distribución por número de predios, Región y Area Homogénea Región Area Homogénea Sin Un Dos Tres Cuatro Cinco o más Total predios predio predios predios predios predios general I Altiplano 306 371 155 55 20 34 941 Desértico 577 197 99 48 100 1.021 Precordillera 12 403 209 136 99 220 1.079 Riego 10 2.317 432 163 73 168 3.163 Total I 328 3.668 993 453 240 522 6.204 II Cordillera 3 16 19 Desértico 17 3 1 21 Riego 38 1.414 366 128 50 70 2.066 Total II 58 1.433 366 128 51 70 2.106 III Cordillera 3 3 Desértico 164 140 17 6 2 2 331 Riego 350 1.635 397 127 57 71 2.637 Urbano 1 1 Total III 514 1.779 414 133 59 73 2.972 IV Costa 111 832 132 26 9 5 1.115 Desértico 16 16 Precordillera 6 27 9 2 2 46 Riego 568 10.150 1.870 528 205 259 13.580 Secano interior 193 2.797 307 80 20 21 3.418 Urbano 32 4 1 1 38 Total IV 878 13.854 2.322 637 235 287 18.213 V Cordillera 24 24 Costa 159 2.298 446 171 96 237 3.407 Precordillera 5 52 2 2 61 Riego 333 12.314 2.582 890 386 547 17.052 SecanoInterior 4 484 107 27 9 20 651 Urbano 52 454 73 18 4 9 610 Total V 553 15.626 3.210 1.108 495 813 21.805 R.M. Cordillera 86 106 13 1 2 2 210 Costa 9 328 73 31 14 20 475 Precordillera 138 47 11 4 1 3 204 Riego 432 10.371 1.737 557 241 442 13.780 Secano interior 8 1.247 299 108 51 47 1.760 Urbano 49 252 27 7 5 11 351 Valle secano 19 10 1 30 Total R.M. 722 12.370 2.170 709 314 525 16.810 6 Región Area Homogénea Sin Un Dos Tres Cuatro Cinco o más Total predios predio predios predios predios predios general VI Cordillera 60 4 3 3 70 Costa 109 2.597 834 341 189 251 4.321 Precordillera 179 25 3 5 212 Riego 69 18.348 3.681 1.424 661 1.080 25.263 Secano interior 28 1.609 556 228 128 151 2.700 Urbano 45 6 1 52 Total VI 206 22.838 5.106 2.000 978 1.490 32.618 VII Cordillera 6 124 23 2 2 3 160 Costa 100 3.074 1.056 473 245 448 5.396 Precordillera 5 1.684 350 108 37 62 2.246 Riego 203 23.418 4.190 1.394 606 750 30.561 Secano interior 77 3.606 1.038 432 190 284 5.627 Urbano 8 59 8 1 1 1 78 Total VII 399 31.965 6.665 2.410 1.081 1.548 44.068 VIII Cordillera 4 1.032 189 79 39 55 1.398 Costa 32 10.707 2.891 1.155 534 794 16.113 Precordillera 20 6.452 1.647 563 252 263 9.197 Riego 53 13.569 3.344 1.240 571 685 19.462 Secano interior 6 7.292 2.073 828 377 515 11.091 Urbano 25 5 1 1 32 Valle secano 1 1.858 441 164 88 103 2.655 Total VIII 116 40.935 10.590 4.030 1.862 2.415 59.948 IX Cordillera 33 2.322 877 251 94 82 3.659 Costa 17 6.696 2.248 864 350 422 10.597 Precordillera 72 5.960 1.836 672 280 383 9.203 Riego 2 3.663 1.318 593 272 293 6.141 Secano interior 19 7.926 2.129 932 447 675 12.128 Urbano 15 1 1 17 Valle secano 12.963 4.234 1.953 947 1.194 21.291 Total IX 143 39.545 12.643 5.265 2.391 3.049 63.036 X Cordillera 861 204 70 18 16 1.169 Costa 28 7.316 1.336 395 155 177 9.407 Ñadis 1 7.288 1.418 373 139 166 9.385 Precordillera 3 1.069 158 30 17 14 1.291 Urbano 278 52 25 8 15 378 Valle secano 59 25.127 6.416 2.186 852 889 35.529 Total X 91 41.939 9.584 3.079 1.189 1.277 57.159 XI Cordillera 221 43 12 3 2 281 Influencia lacustre 110 21 2 3 5 141 Lluvioso-bosque 7 1.107 219 61 27 34 1.455 Trans.-estepario 7 363 97 31 8 17 523 Transición 12 675 174 47 26 23 957 Total XI 26 2.476 554 153 67 81 3.357 XII Coironal 4 491 182 36 33 43 789 Lluvioso-bosque 5 195 29 13 2 7 251 Transición 1 264 58 20 9 17 369 Total XII 10 950 269 69 44 67 1.409 Total país 4.044 229.378 54.886 20.174 9.006 12.217 329.705 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. 7 En lo referente a la distribución interregional de las explotaciones, se observa un patrón de localización bastante concentrado. De hecho, las tres regiones con mayor número de unidades (IX, VIII y X), concentran más de la mitad (54%) del total nacional. Si, además, se agregan las dos regiones siguientes en la jerarquía, se concluye que el 78% de las explotaciones registradas en el Censo se encuentran entre las regiones VI y X. 3.2 Cultivos: el caso del trigo blanco La clasificación de información productiva por Area Homogénea entrega valiosos antecedentes de carácter general que permiten, entre otros aspectos, identificar áreas de especialización y visualizar las disparidades de rendimiento de los diveltrisvos .c Eun esta ocasión se ha utilizado como ejemplo el trigo blanco (Cua(d r3o sy N4), dada la relevancia socioproductiva que éste presenta en prácticamente todo el país. Cuadro N(3 Trigo Blanco: producción y rendimiento por Area Homogénea4 Area Homogénea N( de Sup. de Sup. de Sup. Total Producción Rendimiento Explot. Riego(ha) Secano (ha) (ha) (qq) (qq/ha) Cordillera 1.018 113,5 1.296,5 1.410,0 27.223,0 19,3 Costa 17.228 266,7 42.868,5 43.135,2 1.138.005,0 26,4 Desértico 2 0,1 0,0 0,1 2,0 40,0 Influencia lacustre 26 19,4 0,0 19,4 242,0 12,5 Lluvioso-bosque 26 0,0 58,8 58,8 640,0 10,9 Precordillera 9.154 4.212,6 46.431,8 50.644,4 1.966.380,0 38,8 Riego 25.660 77.552,5 46.396,3 123.948,8 5.113.383,0 41,3 Secano interior 16.185 1.905,0 55.663,3 57.568,3 1.525.760,0 26,5 Transandino-estepario 10 1,6 0,9 2,5 54,0 21,6 Transición 17 0,0 15,2 15,2 271,0 17,8 Urbano 107 102,3 218,6 320,9 15.380,0 47,9 Valle secano 19.837 1.596,0 90.079,0 91.675,0 4.109.865,0 44,8 Ñadis 441 0,0 1.886,3 1.886,3 100.034,0 53,0 Total general 89.711 85.769,6 284.915,2 370.684,8 13.997.239,0 37,8 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. En relación a la información contenida en el Cuad(ro 3 N, es importante constatar el cruce que se produce entre la superficie de trigo declarado como de secano en el Censo pero que se localiza en el Area Homogénea Riego. Las cerca de 46 mil hectáreas bajo esta condición permitirían alertar sobre el nivel de generalización que las Areas Homogéneas eventualmente presentan en su nivel de cobertura geográfica. Asimismo, destaca la amplia prevalencia del cultivo de trigo en condiciones de secano, que alcanza un porcentaje de 77% sobre el total de la siembra. En términos agregados, entre 1976 y 1997 la superficie cultivada de trigo disminuyó en cerca de 30%, aun cuando la producción total se incrementó en prácticamente 120%. 4 La información contenida en las columnas dseu lpae rficie de riego y de secano responde a la información entregada por los encuestados acerca de la condición de producción del trigo en la explotación. 8 Resulta obvio que el factor explicativo de dicha tendencia es el sustantivo aumento de la productividad alcanzada durante el período. Sin embargo, la marcada heterogeneidad en las prácticas productivas y ambientales que caracterizan el cultivo de este cereal se observa claramente al comparar las cifras de rendimiento promedio alcanzado en cada Area Homogénea. Si bien cerca del 75% de la superficie cultivada con trigo presenta rendimientos por sobre el promedio nacional entregado por el Censo (37 qq/ha), el 25% restante, producido en las Areas Costa y Secano interior, se encuentra muy por debajo de esta cifra, con 26,4 y 26,5 qq/ha. respectivam5ente . Cuadro N° 4 Trigo Blanco: producción y rendimiento por Región y Area Homogénea Región Area Homogénea N( Sup.de Sup. de Sup. Total Producción Rendim. Explot. Riego (ha) Secano(ha) (ha) (qq) (qq/ha) I Desértico 2 0,1 0,0 0,1 2 40,0 Precordillera 1 0,5 0,0 0,5 1 2,2 Total I 3 0,5 0,0 0,5 3 6,0 II Riego 56 36,2 0,0 36,2 468 12,9 Total II 56 36,2 0,0 36,2 468 12,9 III Riego 12 38,8 0,0 38,8 1.244 32,1 Total III 12 38,8 0,0 38,8 1.244 32,1 IV Costa 38 15,8 46,8 62,6 395 6,3 Riego 360 1.237,8 406,1 1.643,9 42.886 26,1 Secano interior 202 55,6 230,8 286,4 803 2,8 Total IV 600 1.309,2 683,7 1.992,9 44.084 22,1 V Cordillera 6 2,5 8,5 11,0 129 11,7 Costa 248 9,9 2.517,2 2.527,1 77.567 30,7 Precordillera 1 1,5 0,0 1,5 0 0,0 Riego 447 2.078,0 4.078,4 6.156,4 207.858 33,8 Total V 702 2.091,9 6.604,1 8.696,0 285.554 32,8 R.M. Costa 127 0,0 627,0 627,0 14.655 23,4 Riego 421 3.171,0 828,8 3.999,8 175.030 43,8 Secano interior 117 420,5 768,0 1.188,5 44.551 37,5 Urbano 6 88,3 0,0 88,3 5.393 61,1 Total R.M. 671 3.679,8 2.223,8 5.903,6 239.629 40,6 VI Costa 1.314 33,0 5.166,1 5.199,1 106.549 20,5 Precordillera 2 8,4 0,0 8,4 326 38,8 Riego 1.415 7.759,7 2.155,3 9.915,0 516.397 52,1 Secano interior 1.113 223,1 10.055,0 10.278,1 313.983 30,5 Total VI 3.844 8.024,2 17.376,4 25.400,6 937.255 36,9 VII Cordillera 22 63,5 22,9 86,4 4.154 48,1 Costa 1.301 141,2 3.592,4 3.733,6 62.294 16,7 Precordillera 568 1.433,3 520,3 1.953,6 65.842 33,7 Riego 10.071 37.238,8 11.797,4 49.036,2 2.023.040 41,3 Secano interior 2.028 911,5 7.322,8 8.234,3 208.454 25,3 Urbano 12 14,0 7,2 21,2 580 27,4 Total VII 14.002 39.802,3 23.263,0 63.065,3 2.364.364 37,5 5 Dado que el Censo no entregao dpur cción diferenciada por riego y secano, el rendimiento ha sido calculado de la información de producción agregada y se expresa en qq/ha. 9 Región Area Homogénea N( Sup.de Sup. de Sup. Total Producción Rendim. Explot. Riego (ha) Secano(ha) (ha) (qq) (qq/ha) VIII Cordillera 412 13,0 822,6 835,6 15.875 19,0 Costa 6.496 34,1 12.070,4 12.104,5 188.150 15,5 Precordillera 5.525 2.758,9 28.623,2 31.382,1 1.157.430 36,9 Riego 9.427 24.313,0 16.269,2 40.582,2 1.622.763 40,0 Secano interior 4.710 221,3 11.431,5 11.652,8 175.838 15,1 Urbano 2 0,0 2,6 2,6 7 2,7 Valle secano 1.273 581,9 8.296,9 8.878,8 294.230 33,1 Total VIII 27.845 27.922,2 77.516,4 105.438,6 3.454.293 32,8 IX Cordillera 483 34,5 403,5 438,0 6.255 14,3 Costa 6.129 32,7 11.798,9 11.831,6 318.784 26,9 Precordillera 3.039 10,0 17.279,7 17.289,7 742.556 42,9 Riego 3.451 1.679,2 10.861,1 12.540,3 523.697 41,8 Secano interior 8.015 73,0 25.855,2 25.928,2 782.131 30,2 Urbano 1 0,0 100,0 100,0 6.000 60,0 Valle secano 11.697 1.014,1 61.484,4 62.498,5 2.721.509 43,5 Total IX 32.815 2.843,5 127.782,8 130.626,3 5.100.932 39,0 X Cordillera 95 0,0 39,0 39,0 810 20,8 Costa 1.575 0,0 7.049,7 7.049,7 369.611 52,4 Precordillera 18 0,0 8,6 8,6 225 26,2 Urbano 86 0,0 108,8 108,8 3.400 31,3 Valle secano 6.867 0,0 20.297,7 20.297,7 1.094.126 53,9 Ñadis 441 0,0 1.886,3 1.886,3 100.034 53,0 Total X 9.082 0,0 29.390,1 29.390,1 1.568.206 53,4 XI Influencia lacustre 26 19,4 0,0 19,4 242 12,5 Lluvioso-bosque 26 0,0 58,8 58,8 640 10,9 Trans.-estepario 10 1,6 0,9 2,5 54 21,6 Transición 17 0,0 15,2 15,2 271 17,8 Total XI 79 21,0 74,9 95,9 1.207 12,6 Total general 89.711 85.769,6 284.915,2 370.684,8 13.997.239 37,8 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. El Cuadro N( 4 permite analizar con mayor detalle la información anterior. En efecto, al bajar el nivel de agregación de la información a los valores regionales de cada Area Homogénea, es posible observar mayores niveles de desviación en los estándares productivos vinculados al trigo blanco. Esta posibilidad es útil desde el momento en que se distinguen tanto los promedios obtenidos en cada región administrativa, como la desagregación de éstos, según sea la localización geográfica en eqsuaer rsoella d el cultivo. Sin entrar en detalles acerca de las diferencias productivas observables terinb ulac iódnis espacial del cereal, es necesario llamar la atención acerca de los contrastes entre regiones administrativas observables al interior de cada Area Homogénea. Si se consideran sólo las regiones con niveles de producción cercanas al millón de quintales metricos/año (Región VI) y las superiores a esta cifra (regiones VII a la X), llaman la atención las fuertes diferencias en los rendimientos, inclusive dentro de una misma Area Homogénea. Esta tendencia es claramente visible en el Secano interior y en la Costa, así como dentro del Valle secano, en las regiones IX y X, unidades en las que se alcanzan rendimientos que se ubican entre los mayores del país. La excepción a la tendencia anterior se verifica en el Area Riego, donde, con excepción de la Región VI, la productividad alcanza valores muy similares entre sí, iguales o levemente superiores a los 40 qq/ha. 10 3. 3 Subsector pecuario La heterogeneidad existente en la distribución espacial de las diversas especies ganaderas en el territorio nacional queda de manifiesto en la presentación detallada de la información de este subsector. El Cuadro( N5 nos muestra en forma conjunta lasexistencias de animales, desagregadas por especie, por Area Homogénea y por región administrativa. Un aspecto interesante de destacar es la extrema concentración geográfiecsae qnutaen pr las distintas especies ganaderas dentro del territorio nacional. Sin embargo, existe una significativa diversidad territorial en la especialización pecuaria del país. Al respecto es posible observar cómo más de la mitad de la masa de cada especie se encuentra localizada en a lo más dos regiones contiguas pero diferentes a las de las otras especies: el 62% de las existencias caprinas se encuentra en las regiones IV y V; el 55% de los porcinos, en la VI y la Metropolitana y el 58% del ganado bovino, en la X y la IX. Los casos más extremos son los ovinos y las vacas lecheras, cuyos exponentes se concentran en 52% y 61% en las regiones XII y X, respectivamente. En cuanto a la especialización por Area Homogénea, resulta relevante consignar que cerca de 2.3 millones de bovinos (57% de la masa del país), se distribuyen en las Areas de Riego y Valle de secano, previamente definidas como zonas de alto potencial productivo. Cuadro N( 5 Distribución regional de la masa ganadera por especie y Area Homogénea Región Area Homogénea Caprinos Ovinos Bovinos Vacas leche6ras Cerdos I Altiplano 53 16.039 50 0 7 Desértico 2.377 6.663 447 0 842 Precordillera 1.081 7.176 1.259 9 79 Riego 7.327 16.127 2.862 316 4.222 Total I 10.838 46.005 4.618 325 5.150 II Cordillera 55 191 0 0 0 Desértico 52 116 0 0 601 Riego 5.941 14.677 524 123 2.503 Total II 6.048 14.984 524 123 3.104 III Cordillera 0 0 0 0 0 Desértico 10.688 179 62 15 144 Riego 30.022 8.461 6.544 815 1.859 Urbano 0 0 0 0 0 Total III 40.710 8.640 6.606 830 2.003 IV Costa 30.366 16.410 2.449 64 191 Desértico 5.130 0 0 0 0 Precordillera 3.909 1.181 0 0 0 Riego 173.814 33.678 33.794 3.256 3.718 Secano Interior 92.806 20.633 2.485 153 438 Urbano 31 34 67 19 16 Total IV 306.056 71.936 38.795 3.492 4.363 V Cordillera 233 2.690 494 5 2 Costa 13.493 27.478 32.781 951 32.938 Precordillera 388 2 292 13 34 Riego 59.355 25.955 97.756 11.186 43.091 Secano interior 474 347 2.837 37 10 Urbano 657 102 605 145 77 Total V 74.600 56.574 134.765 12.337 76.152 11 Región Area Homogénea Caprinos Ovinos Bovinos Vacas leche6ras Cerdos R.M. Cordillera 3.784 2.991 4.485 15 29 Costa 301 8.116 5.202 80 61.621 Precordillera 280 125 1.778 30 42 Riego 10.467 10.223 122.352 27.824 309.473 Secano interior 2.320 8.429 28.589 3.228 49.992 Urbano 137 198 1.606 468 465 Valle secano 1.095 159 1.094 2 91 Total R.M. 18.384 30.241 165.106 31.647 421.713 VI Cordillera 3 6.077 2.317 7 12 Costa 3.098 38.723 22.376 369 10.862 Precordillera 908 1.882 2.759 111 16.997 Riego 14.778 22.546 102.069 13.671 490.686 Secano interior 18.177 115.385 27.479 856 1.107 Urbano 0 77 36 21 100 Total VI 36.964 184.690 157.036 15.035 519.764 VII Cordillera 10.515 4.003 6.046 83 164 Costa 2.383 14.635 23.942 1.103 5.323 Precordillera 12.729 11.763 25.078 1.076 1.476 Riego 24.245 94.899 278.636 19.138 117.591 Secano interior 21.534 80.803 39.249 1.187 5.118 Urbano 0 17 319 24 17 Total VII 71.406 206.120 373.270 22.611 129.689 VIII Cordillera 20.916 17.265 20.036 1.322 5.074 Costa 5.978 27.837 125.786 14.784 35.585 Precordillera 26.728 73.105 80.650 3.339 27.601 Riego 8.208 27.127 270.983 49.748 140.719 Secano interior 4.471 24.233 38.293 2.161 14.509 Urbano 5 16 493 202 32 Valle secano 4.265 16.668 24.799 2.240 6.298 Total VIII 70.571 186.251 561.040 73.796 229.818 IX Cordillera 43.349 40.835 59.001 1.587 5.639 Costa 4.198 35.976 102.255 7.825 32.641 Precordillera 6.588 54.512 188.946 11.755 19.739 Riego 246 14.800 85.505 15.673 28.194 Secano interior 1.490 25.023 86.494 3.625 37.650 Urbano 23 84 210 28 30 Valle secano 5.701 75.936 268.040 31.427 67.897 Total IX 61.595 247.166 790.451 71.920 191.790 X Cordillera 3.140 23.983 25.992 3.437 3.414 Costa 11.180 56.126 208.162 50.806 26.918 Ñadis 1.314 52.369 271.740 63.269 17.905 Precordillera 729 14.904 19.821 2.377 1.953 Urbano 275 1.677 11.630 2.018 558 Valle secano 10.994 247.534 1.064.247 257.512 81.182 Total X 27.632 396.593 1.601.592 379.419 131.930 XI Cordillera 1.540 10.898 17.371 1.037 496 Influencia lacustre 49 11.250 3.332 84 161 Lluvioso-bosque 1.744 43.932 58.756 2.564 1.815 Transandino-Estepario 2.257 117.623 33.593 822 502 Transición 7.710 153.862 55.718 1.570 1.060 Total XI 13.300 337.565 168.770 6.077 4.034 12 Región Area Homogénea Caprinos Ovinos Bovinos Vacas leche6ras Cerdos XII Coironal 73 1.542.287 54.301 0 2.006 Lluvioso-bosque 20 288.241 42.979 0 229 Transición 2 93.166 40.394 0 662 Total XII 95 1.923.694 137.674 0 2.897 Total general 738.199 3.710.459 4.140.247 617.6121.722.407 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. Finalmente, un aspecto interesante de resaltar es el hecho que, a pesar del patrón de distribución espacial observado, es destacable que cada especie se concentre en zonas geográficas claramente diferenciadas entre sí. 3.4. Empleo La información presentada en las Cuadro(s 6 N y 7, recogen la situación del empleo registrada en las explotaciones entre los días 24 y 29 de marzo de 1997, de acuerdo a lo solicitado por el Cens6o. Cuadro N( 6 Empleo; distribución por tipo de trabajadores y Area Homogénea Area Homogénea Total Remunerado Remunerado No Permanente Temporal Remunerado Altiplano 2.080 1.465 493 122 Coironal 3.305 2.003 1.141 161 Cordillera 14.048 9.196 909 3.943 Costa 118.269 68.760 22.949 26.560 Desértico 3.007 1.865 854 288 Influencia lacustre 306 168 127 11 Lluvioso-bosque 3.525 2.481 895 149 Precordillera 48.729 33.655 5.847 9.227 Riego 510.298 262.847 203.451 44.000 Secano interior 88.422 48.286 21.005 19.131 Transandino-estepario 1.689 943 681 65 Transición 3.890 2.180 1.427 283 Urbano 4.772 3.136 1.170 466 Valle secano 147.290 87.167 17.445 42.678 Ñadis 23.418 14.427 2.288 6.703 Total general 973.048 538.579 280.682 153.787 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. En relación a la distribución del empleo por categoría ocupacional, llama la atención la disminución prácticamente proporcional entre el contingente de remunerados permanentes sobre el total nacional (55%), de los remunerados temporales sobre los permanentes (28%) y de los no remunerados sobre los no permanentes (15%). 6 Se excepútan los casos de las regiones I, XI y XdIaI,d o que el Censo fue aplicado con anterioridad (mayo a junio en la Región I, entre febrero y mayo en la XI y en abril en el caso de la XII; en los tres casos durante 1996). 13 En cuanto a la distribución territorial del empleo total, en términos de Areas Homogéneas, destaca el que más de la mitad (52%), se localiza en Riego; proporción muy similar al porcentaje del empleo permanente en el mismo sector (49%). Sin embargo, el Area Riego tiene una importancia todavía mayor en el empleo remunerado temporal, pues el 73% de los trabajadores temporales registrados por el Censo en el país se encontraba a la fecha trabajando en esta unidad espacial. En cambio, sólo el 28,6% de los trabajadores no remunerados se ubicaban en el Area Riego, alcanzando el 8,6% de la fuerza total empleada en dicha unidad. Por el contrario, esta última proporción era superada ampliamente en áreas con menor potencialidad productiva actual, como Valle secano, Costa y Secano interior, donde la fuerza de trabajo no remunerada representaba más de 20% del empleo total (29%, 23% y 22%, respectivamente). Cuadro N( 7 Empleo agrícola; distribución regional por categoría y Area Homogénea Región Area Homogénea Total Remunerado Remunerado No Permanente Temporal Remunerado I Altiplano 2.080 1.465 493 122 Desértico 2.455 1.435 803 217 Precordillera 1.782 1.273 442 67 Riego 8.858 5.197 3.202 459 Total I 15.175 9.370 4.940 865 II Cordillera 32 21 2 9 Desértico 35 26 3 6 Riego 4.282 2.332 897 1.053 Total II 4.349 2.379 902 1.068 III Cordillera 4 4 0 0 Desértico 497 389 43 65 Riego 8.669 5.523 2.428 718 Urbano 0 0 0 0 Total III 9.170 5.916 2.471 783 IV Costa 2.045 1.345 39 661 Desértico 20 15 5 0 Precordillera 74 56 3 15 Riego 42.257 23.718 12.139 6.400 Secano interior 5.933 3.906 363 1.664 Urbano 102 82 1 19 Total IV 50.431 29.122 12.550 8.759 V Cordillera 61 56 0 5 Costa 7.002 5.879 552 571 Precordillera 133 73 12 48 Riego 55.509 37.426 13.682 4.401 Secano interior 1.047 810 46 191 Urbano 1.181 951 134 96 Total V 64.933 45.195 14.426 5.312 R.M. Cordillera 398 337 32 29 Costa 1.545 1.051 435 59 Precordillera 434 387 32 15 Riego 76.915 38.630 35.797 2.488 Secano interior 6.109 3.840 2.001 268 Urbano 1.764 1.156 581 27 Valle secano 147 82 54 11 Total R.M. 87.312 45.483 38.932 2.897 14 Región Area Homogénea Total Remunerado Remunerado No Permanente Temporal Remunerado VI Cordillera 59 38 21 0 Costa 6.554 5.480 843 231 Precordillera 707 440 230 37 Riego 125.349 55.945 63.954 5.450 Secano interior 6.267 4.229 1.806 232 Urbano 399 132 233 34 Total VI 139.335 66.264 67.087 5.984 VII Cordillera 327 204 75 48 Costa 9.371 6.634 1.587 1.150 Precordillera 5.206 3.169 1.343 694 Riego 121.424 53.664 56.478 11.282 Secano interior 14.735 7.620 5.501 1.614 Urbano 226 103 112 11 Total VII 151.289 71.394 65.096 14.799 VIII Cordillera 2.542 1.818 139 585 Costa 45.290 21.484 11.834 11.972 Precordillera 17.678 12.458 2.030 3.190 Riego 50.340 31.872 11.709 6.759 Secano interior 28.544 13.600 9.886 5.058 Urbano 153 71 41 41 Valle secano 4.376 3.583 224 569 Total VIII 148.923 84.886 35.863 28.174 IX Cordillera 7.991 4.910 325 2.756 Costa 24.344 12.899 4.543 6.902 Precordillera 20.130 14.066 1.531 4.533 Riego 16.695 8.540 3.165 4.990 Secano interior 25.787 14.281 1.402 10.104 Urbano 48 33 13 2 Valle secano 45.187 28.077 5.857 11.253 Total IX 140.182 82.806 16.836 40.540 X Cordillera 1.917 1.385 79 453 Costa 22.118 13.988 3.116 5.014 Precordillera 2.585 1.733 224 628 Urbano 899 608 55 236 Valle secano 97.580 55.425 11.310 30.845 Ñadis 23.418 14.427 2.288 6.703 Total X 148.517 87.566 17.072 43.879 XI Cordillera 717 423 236 58 Influencia lacustre 306 168 127 11 Lluvioso-bosque 2.701 1.891 687 123 Transandino-estepario 1.689 943 681 65 Transición 2.699 1.563 1.030 106 Total XI 8.112 4.988 2.761 363 XII Coironal 3.305 2.003 1.141 161 Lluvioso–bosque 824 590 208 26 Transición 1.191 617 397 177 Total XII 5.320 3.210 1.746 364 Total general 973.048 538.579 280.682 153.787 Fuente: Elaborado por ODEPA con información del INE. 15 El Cuadro N( 7, permite visualizar las desviaciones que cada región manifiesta en su condición ocupacional, tanto en relación al patrón de referencia nacional como con respecto a los valores promedios alcanzados por cada Area Homogénea. La regiones VI y VII, dos unidades eminentemente agrícolas, escapan claramente al patrón referencial nacional, que muestra al empleo temporal alcanzando prácticamente la mitad del permanente. En efecto, en estas regiones -las que conjuntamente concentraban el 47% de los trabajadores temporales del país a la fecha del Censo- ambas categorías alcanzaban cifras muy similares. Más aún, el empleo temporal superaba al permanente en la Región VI, situación que se verificaba también, e inclusive con más claridad, en el Riego de estas dos unidades. Obviamente, el factor estacional juega un papel explicativo de significación en la concentración geográfica del empleo ocupado en esta zona, debido en gran parte a las cosechas que ocurren fines del mes de marzo. Otro aspecto claramente destacable de la información vertida en el Cu(a 7d reos N el fuerte peso del empleo no remunerado agrícola en las regiones X y IX , donde se concentra el 55% del total nacional. En ambos casos, esta categoría ocupacional supera claramente al empleo temporal, alcanzando cifras cercanas a la mitad del permanente. Esta concentración también se manifiesta en términos intraregionales, desde el momento en que esta categoría de empleo constituye el 30 y el 29% del total registrado por el Censo en cada una de estas regiones, respectivamente. En cuanto a la distribución del empleo no remunerado regional por Area Homogénea, destaca en el caso de la Región X que el 70% de éste se encuentre en el Valle secano. En el caso de la Región IX, el 42% se localiza conjuntamente en el Secano interior y Costa, mientras que el 28% se distribuye en el Valle secano. 4. Conclusiones La posibilidad de contar con información sectorial agregada bajo el criterio de homogeneidad agroecológica, permite corroborar inicialmente la hipótesis planteada. En efecto, se perciben diferencias significativas en las variables, al ser éstas comparadas estadísticamente según su distribución en cualquiera de las Areas Heoamso ugtéilnizadas en este trabajo. El ejemplo más claro se observa al comparar los rendimientos de trigo blanco según Area Homogénea. Los valores promedios logrados por cada unidad no sólo contrastan en forma significativa, sino que también son claramente asociables a las heterogéneas condiciones socioproductivas dominantes en cada una de estas zonas geográficas. Sin embargo, al desagregar la información mencionada anteriormente de acuerdo a la división regional administrativa, también es posible encontrar contrastes de diversa proporción al interior de las Areas Homoegaésn. Nuevamente el caso del trigo blanco es un buen ejemplo. Los contrastes existentes en regiones contiguas en el rendimiento del cereal tanto en el Secano interior como en la Costa, son un buen llamado de alerta para utilizar con per caución el concepto de homogeneidad, al menos en lo productivo, al 16 interior de las unidades definidas por el INE. Contrariamente, la unidad del Riego tiende a mostrar una mayor coherencia entre la homogeneidad ambiental y los valores estadísticos alcanzados en este análisis. Un aspecto interesante de destacar es la clara concentración de las variables analizadas en áreas de alto potencial productivo sectorial. Esto es ampliamente perceptible en el caso del trigo blanco, del ganado bovino e inclusive en los de las explotaciones y del empleo total. Este aspecto contribuye a ilustrar cómo la mayor competitividad alcanzada por el sector durante los veinte años transcurridos durante el período intercensal ha sido, en parte, el resultado de los mayores niveles de especialización productiva lograda dentro de la heterogénea geografía regional del país. Consecuentemente, es factriibr lqeu seu guena proporción bastante significativa del agro nacional está en condiciones de continuar acrecentando el desarrollo de ventajas competitivas hacia el futuro. Finalmente, y bajo cualquier circunstancia, el desafío por afinar la representatividad de la información, para así lograr diagnósticos más explicativos y procesos más informados en la toma de decisiones, sigue vigente. Abierta está la posibilidad de continuar avanzando en los intentos por neutralizar las dificultades de gestión inherentes al manejo de la información agregada, especialmente en un sector que ha demostrado tan amplios contrastes espaciales, tanto en lo social como en lo productivo. 17